‘Los Chapitos’ adoptan la pizza como símbolo de su facción en Culiacán: ¿Qué hay detrás de esta curiosa elección?
Culiacán, 18 de septiembre de 2024 – En los últimos meses, la pizza ha dejado de ser simplemente una comida popular en Culiacán y se ha convertido en un inesperado símbolo relacionado con la facción conocida como ‘Los Chapitos’, liderada por los hijos del famoso narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán. Este inusual vínculo ha generado curiosidad tanto en la sociedad como en las autoridades, quienes investigan la relación entre este platillo y la organización criminal.
La pizza: ¿un símbolo de poder o un código oculto?
Lo que comenzó como una referencia aparentemente trivial en redes sociales, con fotos de pizzas acompañadas de frases que aludían a ‘Los Chapitos’, ha tomado fuerza y trascendió como una representación simbólica de la facción. En Culiacán, varias pizzerías han sido vistas usando imágenes o alusiones indirectas al grupo, generando intriga en la comunidad.
Expertos en el tema del narcotráfico señalan que la elección de la pizza podría tener múltiples interpretaciones. Una de ellas sugiere que el uso de este símbolo tiene el propósito de mostrarse como una organización que busca cierta "normalización" o aceptación entre la población, presentándose de manera más cercana a la vida cotidiana de las personas. La pizza, un alimento común y popular, podría haber sido escogida para transmitir la idea de que ‘Los Chapitos’ no solo son una facción criminal, sino también parte integral de la cultura local.
Otra posible explicación es que el uso de la pizza como símbolo sea un mensaje cifrado dentro de la propia organización o para enviar señales entre sus miembros. En algunos contextos del crimen organizado, ciertos alimentos, colores o objetos son utilizados como códigos para marcar territorios, operaciones o mensajes internos.
Una imagen amigable en un contexto violento
Para algunos, la adopción de la pizza también podría ser un intento de construir una imagen menos agresiva en comparación con la violencia que tradicionalmente ha marcado las acciones de los cárteles de la droga. Al vincularse con algo tan familiar como la pizza, ‘Los Chapitos’ podrían estar buscando una forma de suavizar la percepción pública de su grupo, especialmente entre los jóvenes de Culiacán, quienes son un público estratégico en sus esfuerzos por reclutar nuevos integrantes.
En las redes sociales, se han viralizado memes y contenidos que asocian a la facción con la pizza, lo que sugiere que el grupo ha tenido éxito en crear un nuevo símbolo que conecta con la cultura popular. Para algunos ciudadanos, la presencia de la pizza como un emblema de ‘Los Chapitos’ puede parecer una broma inocente; sin embargo, las autoridades advierten que detrás de este fenómeno podría haber estrategias más profundas de control territorial y cultural.
Respuesta de las autoridades
Las autoridades de seguridad en Sinaloa han tomado nota del surgimiento de este fenómeno y aseguran que están investigando si el uso de la pizza como símbolo tiene algún vínculo con actividades delictivas más amplias, como el tráfico de drogas o la extorsión. En paralelo, se han reforzado las operaciones para desmantelar células relacionadas con ‘Los Chapitos’ en la región.
A pesar de las investigaciones, los negocios de pizzerías que han adoptado simbología relacionada con el grupo aseguran que no están directamente involucrados con la organización y que el uso de imágenes o referencias es simplemente parte de la cultura local.
Un fenómeno en expansión
El uso de la pizza como símbolo por parte de ‘Los Chapitos’ no es un hecho aislado. En otras ciudades de México, grupos del crimen organizado han recurrido a estrategias similares, utilizando elementos de la cultura popular para vincularse con la vida cotidiana y generar una narrativa que los haga más cercanos a la población. Sin embargo, los expertos advierten que estas tácticas no deben ser tomadas a la ligera, ya que detrás de estas elecciones aparentemente inofensivas se esconden intereses de control y manipulación social.
Mientras tanto, en Culiacán, la pizza sigue siendo un tema de conversación tanto en las calles como en las redes, un recordatorio de cómo el crimen organizado busca nuevas formas de dejar su huella en la sociedad.
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